8. UN CAÑÓN SUBMARINO

                                                                                                                                                                                                    

     

p8

 

 

 

   

    Siguiendo la Cañada Real  Soriana en dirección hacia el Sur llegaremos hasta unos afloramientos rocosos formados hace más de 300 millones de años, correspondientes a varios tipos de rocas: por un lado, pizarras y grauvacas, dispuestas de forma alternante y por otro, unos conglomerados  oscuros, con formas angulosas, denominados brechas, constituidos por cantos de  diferentes tipos de rocas preexistentes: calizas, areniscas y cuarcitas, unidas por un cemento arcilloso.

 

 

     

    Las rocas que van a ir apareciendo hasta la parada 10 se depositaron  durante el periodo Carbonífero,  en un medio marino relativamente profundo. La explicación más actual acerca de su origen es la hipótesis  mantenida por el geólogo Liñán,  en 1978, quien supuso que estas rocas se formaron al depositarse los materiales detríticos, de varios tamaños, que formaban  las denominadas corrientes de turbidez,   puestas en movimiento por terremotos o por grandes tormentas, en un talud de fuerte pendiente, dentro de lo que podríamos considerar como un  antiguo cañón submarino.

 

   

    Esto explicaría la disposición alternante  de las grauvacas (formadas por granos algo más gruesos y pesados, del tamaño de las arenas) y las pizarras, cuyas partículas son  más finas y, por consiguiente, poseen  una velocidad de sedimentación mucho menor.

 

    La repetición de estos procesos, en cada uno de los episodios sísmicos o tormentosos del pasado, habría originado este tipo rocas, denominadas también, turbiditas o flysch.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

          

ACTIVIDADES 8  y 19