MATRICULACIÓN Y ENSEÑANZA  DE LA RELIGIÓN

Desde el año 2003, diversos colectivos y asociaciones laicistas han venido presentado denuncias ante la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía,  al entender que la obligación de marcar en el impreso de matrícula una preferencia respecto a la enseñanza religiosa o su alternativa, conculcaba derechos fundamentales y, en concreto, el artículo 16.2 de nuestra Constitución, que recoge textualmente que “nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias”.

El mismo Defensor del Pueblo Andaluz (DPA) reconoció, en su momento,  que no era necesario recabar la opción de todos los padres y madres, sino sólo la de aquellos que optasen por la enseñanza religiosa. Por esta razón, la Consejería de Educación modificó los impresos de matrícula, eliminando de los mismos el apartado relativo a la enseñanza religiosa, lo que provocó que cada centro regulase a su manera el proceso de matriculación, incumpliéndose, en la mayoría, el espíritu de las orientaciones del DPA y de la propia Consejería, que asumió inicialmente estas recomendaciones.

Para tratar de remediar este caos, la Consejería de Educación, en vez de adoptar medidas para garantizar este derecho, en concordancia con los avances conseguidos, da un paso atrás, enviando nuevas instrucciones, como las del curso 2010-2011, con un modelo que incluye sólo las opciones religiosas, ordenando, además, que dicho impreso se suministre a todos los padres y madres junto con el resto de los impresos de matrícula. Esto  supone, en la práctica, volver a la situación previa a las orientaciones del DPA, con la única diferencia de que lo que antes estaba en un solo documento ahora aparece en dos.

Andalucía Laica, asociación en la que se integra Córdoba Laica, considera que, de esta forma, se sigue vulnerando el derecho de los ciudadanos a no  ser preguntados por sus convicciones personales. Además, se interpreta de forma sesgada la normativa que regula la inscripción en los centros, favoreciendo la opción religiosa frente a su alternativa, la atención educativa, dado que la información que se ofrece a los padres, madres y alumnado es incompleta en dos aspectos fundamentales. En primer lugar, porque en ningún momento se menciona que la opción de religión, con sus dos modalidades (confesional e Historia y Cultura de las religiones),  es un área evaluable, que cuenta a la hora de la promoción y de la titulación. En segundo lugar, porque no se ofrece claramente la posibilidad de optar por la “debida atención educativa”, una opción no evaluable, que nuestra asociación promociona en las circunstancias actuales, por considerarla más adecuada para la educación de los niños y adolescentes, mientras persista la actual situación de oferta de enseñanza religiosa confesional en los centros escolares (lo que no significa renunciar al modelo de escuela laica que defendemos, en el que la  religión no tiene cabida en el horario lectivo). Esta falta de concreción puede inducir a muchos padres y madres, así como al alumnado,  a pensar que han de elegir algunas de las opciones presentes en el citado documento, olvidando la existencia de dicha atención educativa.

Exigimos a la Consejería que cumpla la orden que regula el proceso de matriculación en los centros públicos y concertados, independientemente de su ideario, y, en lugar de proporcionar dicho impreso sistemáticamente, en el sobre de matrícula, se informe de que aquellos padres y madres que lo deseen pueden retirarlo del lugar que designe la Dirección del centro, sin que exista obligación de cumplimentarlo,  haciendo mención expresa de que aquellos alumnos que no elijan la enseñanza religiosa, y no devuelvan firmado el citado documento, serán atendidos por el centro en las mejores condiciones, durante el tiempo que se dedique al adoctrinamiento de sus compañeros/as. Con este procedimiento se daría cumplimiento a la necesidad de recabar la información necesaria para la planificación del centro, sin menoscabar los derechos de los padres, madres y alumnos/as.

Manuel Luque Muñoz/ Casimiro Barbado López

CÓRDOBA LAICA